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Este sábado 2 de abril se celebra el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, una iniciativa creada por la Asamblea General de las Naciones Unidas para poner el foco en la necesidad de contribuir socialmente con iniciativas que favorezcan la inclusión y mejoren la calidad de vida de las personas con autismo.

Bajo el lema “Un viaje feliz por la vida” la campaña de 2022 se centra en el derecho que tienen las personas con trastorno del espectro autista (TEA) y sus familias a disfrutar de una vida feliz.

Desde las asociaciones (como Autismo España) se insiste en la necesidad de poner en marcha mecanismos que permitan el diagnóstico precoz y comprender las necesidades especiales de este colectivo, facilitándoles los apoyos que necesitan para vivir vidas plenas.

Derribar los prejuicios sobre el autismo.

Aunque la mayoría de la población ha oído hablar sobre el TEA, todavía existen muchos perjuicios sociales que estigmatizan a las personas con autismo. Muchos piensan que se trata de una enfermedad mental o que implica necesariamente la restricción de la capacidad verbal (habla).

En realidad, cada caso  de autismo presenta unas diferencias únicas y por eso es tan importante contar con un diagnóstico y atención personalizada.

Algunas aclaraciones:

  • El autismo es un trastorno de origen neurobiológico que se manifiesta en los primeros años de vida. Según la Confederación Autismo España, de cada cien nacimientos habría un caso de TEA.
  • Es una condición que afecta al funcionamiento del cerebro y del sistema nervioso. No se considera una enfermedad, motivo por el que no es acertado hablar de “curación”.
  • Tiene un origen multifactorial aunque se piensa que la genética tiene mucho peso en su desarrollo. Casi un 80% de los afectados de TEA tienen antecedentes familiares.
  • No existen test específicos para diagnosticar el autismo. Por lo general, se manifiesta en las competencias cognitivas  del niño y en determinados rasgos de su comportamiento.
  • No hay dos personas con autismo iguales. A pesar de que el TEA se detecta por dificultades en el área de la comunicación e interacción social o por limitaciones para adaptarse a los cambios, las personas con autismo tienen diferentes sueños, necesidades y capacidades. Algunos individuos presentan, además del autismo, algún tipo de discapacidad intelectual. Otras personas en cambio tienen una capacidad prodigiosa para adquirir nuevas habilidades; es el caso del “síndrome de Savant”, una patología asociada al autismo que se detecta por la facilidad de adquirir destrezas de forma extraordinaria, como memorizar datos o tocar instrumentos sin necesidad de aprendizaje.
  • Las personas con autismo, ya sean niños, adolescentes o adultos, experimentan dificultades a nivel emocional que impactan de forma negativa sobre su calidad de vida. Por ejemplo, más del 46% de los niños con TEA sufren acoso escolar. De ahí la necesidad de que se tengan en cuenta las necesidades específicas de estos alumnos dentro del aula, no sólo para alcanzar el éxito académico, sino también para evitar experiencias negativas que fomenten aún más su aislamiento y exclusión.

¿Cómo promover la salud mental de las personas con TEA?

La detección temprana es la primera medida para favorecer el desarrollo y la calidad de vida de los niños con autismo.

No debemos olvidar que, aunque el autismo no sea una enfermedad de salud mental, las personas que lo padecen son más propensas a sufrir depresión y ansiedad. Además, el TEA impacta en la vida cotidiana de las familias y cuidadores, por eso es importante que el apoyo psicológico sea integral y se centre en mejorar el bienestar emocional de la persona afectada y también de su entorno más cercano para ayudarles a comprender las situaciones difíciles y a buscar la mejor manera de enfrentar las dificultades.

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